Mi gris mundo cojea por sus cuatro grises patas,
la señora gris me vocifera por perder mi gris ilusión.
"señora, yo soy gris pero ojalá no lo fuera".
Vaya escándalo para el gris pueblo.
Parece que todos se olieron mi gris señuelo,
"perdonen por ser pesimista pero el cielo gris
no creo que vaya a cambiar."
Y lo sé por experiencia,
ya que le he visto la dentadura gris a la suerte mientras se reía de mí.
Me regodeo en mi gris sentimiento,
¿dónde está todo el mundo?
Basta de grises canciones,
mis ojos se han vuelto grises con ellas,
y mis méritos se cuentan por grises sombras.
Ahora has probado tu gris veneno,
ahora sabes lo que se siente, ¿verdad?
Pues te deseo lo mejor en tu gris hedonismo,
no te preocupes, aquí no desentonas...
Y aquí no pintas nada.
Húndete en el barro gris mientras espero días claros
Comprueba lo gris que puede llegar a ser este juego
cuando sólo juega uno.
Espero que las caras grises de esos pobres diablos no se rían mucho de ti.
Ya no babearán más.
Tus motivos son grises y tus excusas se acaban.
No obstante, querido mundo gris, he de confesarte
con el mayor amor del gris corazón, que te odio.
Si ya no me queda otra,
prefiero el negro luto de la gris muerte.
Sé que algún día sabrás perdonarme
Luiggi Pirandello
No hay comentarios:
Publicar un comentario